AMISTAD EMBOTELLADA (autora: Renata Arréguez Juárez - 6° grado)
Un día de vacaciones en La Toninas nos metimos en el mar con mis hermanos para refrescarnos y también divertirnos. Ya al atardecer nos fuimos a recorrer los médanos. Después de unos minutos de caminar, llegamos a un lugar donde había muchas piedras y vimos tirada una botella antigua de vidrio que tenía un papel adentro. La agarramos, sacamos el papel y lo leímos. Era un mensaje de un niño para su mejor amiga. Le decía que a pesar de que tenía que irse a otro país, jamás se iba a olvidar de esa hermosa amistad.
Decidimos buscar a la niña del mensaje ya que en la carta estaba escrito su nombre y pensamos que sería de la zona. Nos pusimos a investigar pero no la encontramos porque cuando en las redes sociales poníamos el nombre siempre aparecía una mujer mayor.
Desanimados, decidimos escribirle a esa mujer para ver si nos podía ayudar con alguna pista.
Cuando nos respondió nos sorprendió porque nos contó que la niña en realidad era ella misma. Se puso muy contenta y dijo que cuando eran chiquitos iban todos los días a jugar a la playa y que ya habían pasado treinta años desde que su amigo se había ido. Ella lo había buscado, pero no lo pudo encontrar. Estaba feliz.
Esta tierna historia que nos regala Renata nos dejó pensando en cómo a veces el azar nos trae lindas noticias, como a esta señora que treinta años después recibe un hermoso mensaje. ¿Qué hubiese pasado si Renata y sus hermanos no intentaban cerrar esa historia de amistad encerrada en una botella?
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